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Redacción: Quadro24
Fuente: EFE, Reuters
Fotografía: Reuters
El huracán Beryl, degradado ahora a tormenta tropical, ha dejado un rastro de destrucción y caos en Texas después de tocar tierra en la madrugada del lunes como un ciclón de categoría 1. El impacto del fenómeno meteorológico ha sido devastador, cobrando la vida de al menos tres personas y dejando sin electricidad a más de 2.5 millones de residentes en el estado.
Las víctimas mortales, según informó el alguacil del condado de Harris, Ed González, incluyen a una mujer de 74 años y un hombre de 53, ambos fallecidos trágicamente cuando árboles cayeron sobre sus viviendas en el área de Houston. Una tercera persona perdió la vida por ahogamiento, subrayando la peligrosidad de las inundaciones provocadas por las intensas lluvias.
El impacto de Beryl se ha sentido con especial fuerza en la infraestructura crítica del estado. Los aeropuertos internacionales George Bush y William P. Hobby en Houston se vieron obligados a cancelar el 70% de sus vuelos, paralizando gran parte del tráfico aéreo en la cuarta ciudad más poblada de Estados Unidos. Además, se registraron vientos sostenidos de 95 km/h, con ráfagas que alcanzaron los 132 km/h, según datos del Centro Nacional de Huracanes (NHC).
Las imágenes que llegan desde poblaciones costeras como Surfside Beach muestran el alcance de la devastación: calles inundadas, árboles derribados y escombros esparcidos por doquier. Las autoridades han cerrado el tráfico vehicular en varias zonas afectadas mientras evalúan los daños y trabajan en las labores de limpieza y recuperación.
Aunque se espera que Beryl se debilite gradualmente a medida que avanza hacia el interior del país, los meteorólogos advierten que la amenaza de inundaciones y tormentas severas persistirá en los próximos días mientras el sistema se mueve hacia el valle del Mississippi y posteriormente hacia el valle de Ohio. Este evento marca el inicio de lo que se pronostica será una temporada de huracanes particularmente activa en el Atlántico, con la posibilidad de hasta 13 huracanes, de los cuales siete podrían alcanzar categorías mayores.
Las autoridades instan a la población a mantenerse alerta y seguir las indicaciones de seguridad mientras continúan los esfuerzos de rescate y recuperación en las áreas más afectadas por el paso de Beryl.