En un giro significativo para el panorama tecnológico global, el Departamento de Justicia de Estados Unidos está considerando solicitar medidas drásticas contra Google, que podrían incluir la venta forzada de segmentos de su imperio digital. Esta decisión surge después de que el juez federal Amit Mehta dictaminara en agosto que el gigante tecnológico había abusado de su posición dominante en el mercado de búsquedas en internet.
Los fiscales federales presentaron el martes un documento legal que detalla posibles remedios para abordar las prácticas anticompetitivas de Google. Entre las propuestas más relevantes se encuentra la apertura obligatoria de sus valiosos datos de búsqueda a competidores, un recurso que actualmente alimenta no solo su motor de búsqueda sino también sus desarrollos en inteligencia artificial. Esta medida buscaría nivelar el campo de juego en una industria donde Google ha mantenido un control férreo sobre los principales canales de distribución.
Las autoridades antimonopolio están evaluando implementar «cambios estructurales» que afectarían productos emblemáticos de la compañía, incluyendo el navegador Chrome, el sistema operativo Android y su tienda de aplicaciones. Un punto crucial en la estrategia del Departamento de Justicia es la posible limitación o prohibición de los acuerdos de «búsqueda por defecto» que Google mantiene con diversos fabricantes y proveedores de servicios, los cuales han sido identificados como una herramienta clave para mantener su monopolio.
La respuesta de Google no se hizo esperar. Lee-Anne Mulholland, vicepresidenta de asuntos regulatorios de la empresa, advirtió sobre las posibles «consecuencias negativas involuntarias» que estas medidas podrían tener para la innovación y los consumidores estadounidenses. Mientras tanto, el juez Mehta ha establecido un calendario que contempla un juicio sobre las posibles soluciones para la próxima primavera, con una decisión esperada para agosto de 2025. Aunque Google planea apelar el fallo, expertos como George Hay, de la Universidad de Cornell, señalan que el proceso de apelación podría extenderse hasta cinco años, marcando un periodo de incertidumbre para el futuro de uno de los gigantes tecnológicos más influyentes del mundo.
Créditos de la Nota |
Redacción: Quadro24
Fuente: Associated Press, documentos legales del Departamento de Justicia de Estados Unidos
Fotografía: Shutterstock