La violencia en el sur del estado de Sinaloa ha paralizado las actividades de las constructoras en Guasave durante los últimos 40 días, afectando gravemente sus operaciones y finanzas. Durante una reunión del Consejo para el Desarrollo Económico de Sinaloa, Abraham Cervantes, presidente de Canacintra, informó que las empresas del sector no solo han dejado de trabajar, sino que tampoco han podido cobrar sus contratos ni trasladarse a Culiacán, lo que ha generado una situación de urgencia.
Cervantes expresó su preocupación por el impacto que esta situación está teniendo en los contratos vigentes, muchos de los cuales están a punto de vencer. La incapacidad para cumplir con las obligaciones contractuales puede resultar en multas e infracciones, lo que sería un golpe devastador para un sector ya golpeado por la inestabilidad. Las constructoras se encuentran en una situación crítica, atrapadas entre la violencia y la necesidad de cumplir con sus compromisos.
A pesar de recibir apoyo del Gobierno del Estado, los empresarios sienten que están caminando sobre una cuerda floja. Durante la reunión, el director de las Mipymes en la Secretaría de Economía, David Lizárraga, sugirió que, al igual que se ha gestionado el desabasto en la canasta básica, también se podrían coordinar esfuerzos para ayudar a las constructoras locales a asegurar el suministro de materiales y la continuidad de sus proyectos.
La creciente violencia en la región no solo afecta a las constructoras, sino que también podría tener repercusiones en la economía local en su conjunto. La incertidumbre que se vive actualmente requiere atención urgente para evitar un deterioro mayor en el sector y en la comunidad en general.
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Redacción: Quadro24
Fuente: Conferencia de Prensa
Fotografía: El Sol de Sinaloa