La industria digital está explorando nuevas formas de abordar la pérdida de seres queridos mediante el uso de la inteligencia artificial (IA). Diversas empresas están desarrollando aplicaciones que permiten «hablar» con los fallecidos a través de avatares virtuales, planteando tanto oportunidades como desafíos éticos y psicológicos en el proceso del duelo.
Estas tecnologías, conocidas como «robots de duelo», se crean utilizando la huella digital del fallecido, procesando información de redes sociales, mensajes y correos electrónicos para generar respuestas que imiten su forma de pensar y expresarse. Las opciones varían desde chatbots de texto hasta avatares con voz e imagen del difunto.
Expertos como la Dra. Belén Jiménez de la Universitat Oberta de Catalunya señalan la complejidad de este fenómeno, destacando la importancia de equilibrar el respeto a la dignidad del fallecido con el bienestar psicológico del usuario. Aunque estas herramientas podrían ofrecer consuelo, también presentan riesgos como la creación de dependencia emocional o la alteración de los recuerdos del ser querido.
La industria enfrenta desafíos éticos y legales significativos. Un estudio de la Universidad de Cambridge advierte sobre los peligros de un diseño descuidado, como la posibilidad de publicidad no deseada o respuestas confusas que podrían angustiar a los usuarios. Además, surgen preguntas sobre la protección de datos y los derechos de imagen post mortem.
Desde el punto de vista legal, el abogado Sergio de Juan-Creix explica que en España, aunque los derechos personales se extinguen con la muerte, la tutela de la memoria de los fallecidos corresponde a sus herederos. La regulación de estas tecnologías está en desarrollo, con la aplicación potencial de normativas europeas de IA y protección de datos.
Mientras algunos usuarios encuentran consuelo en estas aplicaciones, otros experimentan sentimientos encontrados. El documental «Eternal You» explora estas primeras experiencias, revelando tanto el alivio como la inquietud que pueden generar. A medida que estas tecnologías evolucionen, será crucial abordar sus implicaciones éticas, psicológicas y sociales para asegurar que su uso sea beneficioso y respetuoso en el delicado proceso del duelo.
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Redacción: Quadro24
Fuente: EFE
Fotografía: EFE